Conjugase en mí todo el patetismo de la vida
sus más altas cumbres y sus caídas hondas...
En mí se funden candor y astucia, calor y frío
y se yerguen orgullosas altivas ramas
pero también tristes aguaceros y gélidas simas,
sinsentidos dolorosos y transidos sinsabores...
La vida toda se deleita exuberante
...mas también conozco sus humildes grietas y contradicciones
Y es que nací de la encrucijada del amor y el odio
En mí se acrisoló la espada de Teseo,
y también la concupiscencia del dios Baco
escanciáronse las copas del deleite y de la vida
con uvas de Dionisos y cantos de sirena
y asimismo los redobles otoñales
de una muerte fermentada y una calavera herida...
Soy ambas sustancias: alba y noche, dolor y goce
Por ello canto entre mis versos
y a veces lloro entre mis prosas
Sé que el mundo no entiende de estas cosas
y cual locura desquiciada trata esta quimera:
de ser dios y hombre en esta aurora y a su vez pútrida
mortaja en el ocaso...
©Gustavo Bonelli V.
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